Esta enfermedad afecta sobre todo a los adultos mayores y se estima que en Argentina hay más de 300 mil casos. El 21 de septiembre se conmemora el Día Mundial del Alzheimer, por ello desde COSSPRA profundizan el trabajo en materia de prevención y promoción de la salud, impulsando prácticas de vida saludables.
(20/09/2016, Ciudad Autónoma) El Alzheimer es una enfermedad degenerativa del cerebro, producida por la pérdida de una sustancia que permite que las células nerviosas se comuniquen entre ellas, función que disminuye progresivamente y afecta el aprendizaje, la memoria y el pensamiento. De acuerdo con estimaciones llevadas a cabo por la Organización Mundial de la Salud (OMS), en América del Sur se incrementarán los casos en un 300 por ciento, para el año 2040.
Un estudio difundido por la revista especializada The Lancet Neurology hizo foco como factores de riesgo para el desarrollo del Alzheimer en la «diabetes, hipertensión en la edad adulta, obesidad, inactividad física, depresión, tabaquismo y bajos niveles de educación». Entre los siete factores identificados por los expertos, la mayor proporción de casos de personas con Alzheimer en Estados Unidos, Gran Bretaña y el resto de Europa son atribuidos a la inactividad física.
«Haciendo actividad física y reduciendo los niveles de obesidad, hipertensión y diabetes, una persona puede prevenir padecer de demencia senil», explicó el presidente del Consejo de Obras y Servicios Sociales Provinciales de la República Argentina (COSSPRA), Gabriel Chagra Dib. Y agregó: “Nuestra sociedad necesitar cambiar hábitos para revertir el crecimiento de estas enfermedades. Un dato muy relevante es que el riesgo de demencia es un 45% más alto entre las personas fumadoras”, finalizó.
Por ello, desde COSSPRA aconsejan una serie de aspectos a tener en cuenta para retrasar y prevenir el inicio de esta enfermedad:
Actividad física: caminar media hora al día a buen ritmo es una excelente forma de mantenerse en movimiento y realizar ejercicio.
Alimentación saludable: se considera que alimentos como la manzana, frutilla, zanahoria, cítricos, brócoli, calabaza, uvas, tomate, pescado y las legumbres tienen propiedades protectoras contra la demencia.
Cerebro activo: es fundamental tomar conciencia acerca de la importancia de conservar, además del cuerpo, la mente activa. Por eso, se recomienda a los adultos mayores aprender idiomas, tocar un instrumento, hacer crucigramas o leer, por mencionar algunas actividades.
Sociabilizar: llevar adelante una vida social intensa colabora en la reducción del riesgo de padecer esta enfermedad, por las implicancias que tiene: desplazarse
hacia determinados sitios, charlar con amigos u otras personas, escuchar, argumentar o contra argumentar, por citar algunos ejemplos.